Resumen:
El principio "nullum crimen, nulla poena sine lege” constituye un medio de limitación al poder punitivo del estado. Estima que es conveniente la permanencia de este principio debido al poco desarrollo de nuevas técnicas sociales más humanas para combatir actos negativos para la sociedad. Su vigencia y eficacia metodológica debe consagrarse legislativamente, para ello se debe establecer expresa y constitucionalmente la existencia de formular los delitos en tipos o estructura cerradas de acción, y en consecuencia determinar la exigencia procesal de la tipificación.