Resumen:
Aborda la medicación tónica como medio terapéutico para restablecer o aumentar la energía vital del paciente enfermo o convaleciente a través de tres alternativas de medicación, como la tónica corroborante que contribuye a que los tejidos tengan mayor vigor y regularidad en todas las funciones; la astringente con una aplicación local que disminuye las propiedades vitales de los tejidos, con efectos calmantes pasajeros y el estimulante que aumenta la energía de todas las funciones, circulación y calor pero sus efectos duran poco. Asimismo, explica las indicaciones de uso y contraindicaciones de los diversos tónicos como la quina, la quinina, cinchomina, la raíz de colombo, yema de huevo, baños fríos, el aire puro, gimnasia entre otros.